¿Te refieres a qué son? Los satélites artificiales (los que lanzamos al espacio) son máquinas que prácticamente tienen que ser autosuficientes, no tienen ayuda si se rompen o para obtener energía. Los hay de varios tipos: satélites de telecomunicaciones, que se encargan de dar servicio de televisión o intenet, por ejemplo, a los usuarios de la Tierra; satélites científicos, que pueden llevar a cabo misiones científicas de investigación de otros planetas o se dedican a la observación de la Tierra (controlar recursos de agua, plantaciones de cultivos,…); y finalmente están los satélites de defensa, que hoy en día se dedican básicamente a la vigilancia de fronteras.
Comentarios